La teología se puede iluminar y enriquecer con la aportación que ofrecen los santos, verdaderos amigos de Dios. Ese fue el planteamiento del congreso internacional "San Josemaría y el pensamiento teológico", organizado en Roma por la Pontificia Universidad de la Santa Cruz.
"Los santos son aquellos que más íntimamente han conocido a Dios. Y si la teología lo que quiere es conocer a Dios, pues tiene que recurrir a las enseñanzas de los santos"
"El testimonio de los santos es necesario para la teología porque los santos son los que han conocido mejor a Dios y ofrecen luces nuevas y originales para el trabajo teológico"
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