miércoles, 8 de febrero de 2023

Conchita C-29: ¡Dos años ya!


 Managua, 9 de febrero de 2023

Querida mamuchi:

Se cumplen ya dos años de tu llegada al Cielo, ¡a casa! ¡con papá!

¿Es parecido el Cielo a Vinadel, 20, luego Vinadel, 16 o San Benito, 2 cuarto piso? ¿Es parecido a La Loma?

Yo lo pienso así. Y no debo de estar muy equivocado, cuando Benedicto XVI se imaginaba el Cielo como los domingos en casa, con sus hermanos y sus padres.


 En el Encuentro Mundial de las Familias de Milán, en 2012, una niña vietnamita le preguntó sobre su niñez. Y él respondió que cuando pensaba en cómo sería el Paraíso, imaginaba un lugar como su infancia. Y dijo: "Espero ir a casa cuando vaya al otro lado del mundo"

No sigo escribiendo, sí soñando. Dejo paso a Fede, el africano, que fue quien inició estas cartas al Cielo y tiene todavía muchas cosas que contar.

Besos para papá y para ti

Alfredo

------------------------------------------------------------------------

Kinshasa, 9 de febrero de 2023

Mamaíca mía:

Hoy hace dos años que llegaste al Cielo para la Fiesta interminable. 15 minutos antes de medianoche. El mismo día que mi padrino Pepe y Leonardo Polo.

Pues aquí también estamos saboreando la fiesta del viaje del papa Francisco. La has seguido muy bien con las crónicas de Alfredo.

Cuando me cruzo con la gente no son pocos, sobre todo los niños, que me dicen o gritan: "Pap", pues piensan que con mi sotana blanca y mis pocos pelos del mismo color, soy el mismísimo, sin silla de ruedas.

He seleccionado 6 fotos para el álbum histórico.

La primera, la de los confesonarios esparcidos por el aeropuerto de N'dolo durante la vigilia nocturna. A mí me impresiona.


La segunda la llegada del Papa:


La tercera, la niña tras la rejilla:


La cuarta el ambiente en el estadio:


La quinta, los cinco dedos de la mano: oración, fraternidad, honestidad, perdón y servicio:


La sexta, la Virgencica de Banti:


Y en la última me puedes ver con una de las muchas estampas que distribuí a los enfermos de Monkole para que rezaran por el viaje.

Todo un éxito


Que la Fiesta siga adelante.

Te quiere tanto, tu hijo

Fede

sábado, 4 de febrero de 2023

El Papa Francisco en el Congo (y 5)


 Colorín, colorado. Y este cuento se ha acabado

Querido hermano:

El viaje de nuestro Papa Francois al Congo ha sido un cuento de los que nos gustará volver a leer una y otra vez.

Y que contaremos diciendo: allí estaba yo.

Y de este 3 de febrero 2023 me he quedado con la foto con todos los obispos en la sede de la CENCO, la Conferencia episcopal del Congo, afamada por ser el contrapeso del poder, gracias a la doctrina social de la Iglesia.



Todos muy unidos al Papa. Ejemplo para el mundo.

Francisco les dijo: Y, ahora que he llegado al final de este viaje, quiero expresar mi gratitud a ustedes y a quienes lo han preparado aquí. Tuvieron la paciencia de esperar un año, ¡sois muy buenos! Gracias por eso.

Han tenido que trabajar dos veces, porque la primera vez se canceló la visita, ¡pero sé que sois misericordiosos con el Papa! ¡Muchas gracias!



En junio, celebraréis el Congreso Eucarístico Nacional en Lubumbashi. Jesús está realmente presente y obrando en la Eucaristía; allí restaura y sana, consuela y une, ilumina y transforma; allí Él inspira, sostiene y hace eficaz vuestro ministerio. ¡Que la presencia de Jesús, el pastor manso y humilde, vencedor del mal y de la muerte, transforme este gran país y sea siempre vuestro gozo y vuestra esperanza! Les bendigo de todo corazón.

Me gustaría agregar solo una cosa: dije "sean misericordiosos". Misericordia. Siempre perdonad.

Cuando un creyente viene a confesarse, viene a pedir perdón, viene a pedir una caricia de su Padre. Perdonen, perdonen siempre. Y serán sembradores del perdón.

Les bendigo con todo mi corazón. Por favor, sigan rezando por mí, pues esta carga..., es un poco difícil. Pero me confío a ustedes. Gracias.

¡Reza tú también, hombre!

Las últimas fotos hacia el aeropuerto muestran como el Presidente Tshisekedi lo ha acompañado hasta el pie del avión.

Y hay que agradecer el inmenso trabajo realizado por el Nuncio Ballestero. ¡Chapeau!


Quiero dejar constancia de otro piropo que nos echó nada más empezar su discurso a la CENCO: Mi estancia en vuestro país ha sido muy agradable, un país que con su selva es el corazón verde de África, y un pulmón para el mundo entero.

Toda la Iglesia tiene necesidad de respirar el aire puro del Evangelio, eliminar la terrible polución de la mundanidad, guardar el corazón joven de la fe.

¡Gracias por ser un pulmón que alienta a la Iglesia universal!

No debo ocultarte que, imagino, algún obispo también se removió de su asiento, cuando Francisco abrió su corazón de padre para prevenir lo que hay que prevenir: la mundanidad.

El remedio: dos elementos, la proximidad de Dios y la profecía para el pueblo.


1. Proximidad de Dios:

Es decir, oración. ESTAR DURANTE HORAS DELANTE DE ÉL.

Durante horas.

Durante horas.

Porque la mundanidad es lo peor que le puede suceder a la Iglesia.


2. Ser profetas para el pueblo:

El profeta es el que habla en nombre de Dios. Nuestra identidad episcopal es la de quien está inflamado por el Fuego de la Palabra, en salida hacia el pueblo de Dios, con celo apostólico...


Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

Circulan por ahí los cinco dedos de Francisco para los jóvenes:


Y la Virgen bonica de Banti

 (Banti es una de las casas de retiro de la Obra en Kimbondo)

Un abrazo

Fede


viernes, 3 de febrero de 2023

El Papa Francisco en el Congo (4)

 


2 febrero en Catedral de Kinshasa con sacerdotes

Querido hermano:

Ayer no te conté otro de los momentos fuertes que hemos vivido en la Catedral de Kinshasa con el Papa Francisco.

Sacerdotes, religiosos, seminaristas.

La lluvia ha caído cuando debía caer. La noche antes de la vigilia de Ndolo y una hora antes de este encuentro en la Catedral. Lavó el calor en el momento oportuno.

Organización perfecta.



Esta mañana, predicando en una homilía, les decía a los asistentes a la Misa que teníamos que rumiar lo que Francisco nos ha dado: Y en la Catedral nos dijo tres cosas: la primera se me olvidó en ese momento, la segunda, no al confort mundano, y la tercera, no a la superficialidad. Todo eso se puede resumir en un no a la frivolidad.

Más adelante, durante la Misa, me acordé de lo primero que nos había dicho: no a la mediocridad.

Eso viene a cuento, sin alargarlo, para explicar por qué sentimos un gran entusiasmo. A algunos congoleses no les gustó que el cardenal Ambongo repitiera que somos un pueblo que sufre. Y no les gustó porque, decían, hay que presentarse con dignidad..


Pues bien, quizá lo que nos ha más confortado es darnos cuenta de que podemos organizar grandes acontecimientos como ha sido esta visita. ¿Has visto los decorados? Pero es que están  que muy bien. Demos gracias a Dios.

¡Dale gracias a Dios, hombre!


El Papa nos dijo a los sacerdotes que la mediocridad se vence con la oración. Y nos detalló todo un plan de vida: Misa, liturgia de las horas, oración mental, rosario... y no faltaron las jaculatorias y la confesión frecuente, para saber perdonar al pedir perdón.

Después nos dijo que no al confort mundano. Nos reíamos pensando en los bancos de la Catedral, un poco antiguos, son incomodísimos. Estar sentados en ellos durante cuatro horas (pues había que estar allí al menos dos horas antes) es la victoria contra el confort. Los que se quedaron fuera en sillas de plástico, vivieron el encuentro mejor que los de dentro, al menos con más confort, no sé si con más fervor.

En definitiva, cultivar el arte de la proximidad, saliéndonos de nuestra tendencia a la comodidad.


El Papa Francisco habla muy claro. A los curas burócratas del espíritu les dijo que se ocupan de las finanzas o de sus negocios en lugar de servir. Algunos se movieron en sus bancos. Ya digo que son incómodos, no pienses otra cosa.

La falta de sobriedad de un sacerdote es un escándalo.

Si encuentras en español las palabras del Papa te servirán. No te lo digo por ti, sino por tus amigos sacerdotes.

Hizo también una breve alusión a la felicidad del celibato.

Y por fin, no a la superficialidad. Tenemos que ser sacerdotes apasionados por el Evangelio. La formación, el estudio de la teología, los libros. La formación permanente.

¡Somos Cristo que pasa!

Y muchos otros sacerdotes deben surgir en el Pueblo de Dios.

No sé si tú te acuerdas, Alfredo, de aquellas canciones que se cantaban en Murcia el día del Seminario; "suscita sacerdotes, entre los niños buenos". Quizá tú eras muy pequeño. Yo sí me acuerdo bien. Ya puedes imaginar por qué.

No dejó de referirse al tribalismo (y hubo algún otro movimiento en los bancos incómodos). Vivamos la fraternidad entre nosotros.

Un último consejo: no a la rigidez. Proverbio africano: "lo que se pliega, no se rompe con el viento".

Plegarse no es debilidad, sino fuerza. La fuerza de la humildad, al no agarrarse a la propia opinión.

Y terminó como siempre: no se olviden de rezar por mí.

Reza, hombre, reza por mí.

Fede


jueves, 2 de febrero de 2023

El Papa Francisco en el Congo (3)

 


2 de febrero 2023 por la mañana

Querido hermano:

Dos días antes de la llegada del Papa Francisco, una tormenta nocturna derribó el pódium instalado en el estadio de los Mártires, donde hoy los jóvenes y los catequistas se han reunido en masa, en torno a la esperanza.

Aquí la foto con el pódium tras la ventolera que lo tiró abajo:


Congo joven. Creciendo. No nos creemos que seamos capaces de una organización tan buena como la de ayer en el aeropuerto Ndolo, en el centro de la ciudad. Pues bien, hoy los jóvenes del mundo estaban en el estadio de los Mártires, con el pódium rehecho en tan poco tiempo. El locutor se ha atrevido a decir que la próxima JMJ debe ser en el Congo.


Ayer vimos, estremeciéndonos, el testimonio de las víctimas del Este. Niños, mujeres, ancianos, ciegos y cojos, consolados por Francisco.

Nos dejó dos "NO" y dos "SÍ"

NO a la violencia y a la resignación; SÍ a la reconciliación y a la esperanza. Esperanza que se llama Jesús, Jesús.


Hemos visto conmovidos cómo víctimas elevaban los brazos para mostrar que no tenían manos, amputadas. Y presenciamos cómo depositaban al pie de la Cruz, machetes, martillos y barras de hierro con los que habían sido heridos. El Papa estaba dolorosísimo: Cometer violencia contra una madre es hacerlo contra Dios.


Y hoy la fiesta. Las calles de Kinshasa, los caminos agujereados, rebosan de alegría cuando Francisco pasa. Es el Evangelio. Sembrador de Paz.


El estadio, de 80.000 plazas estaba a rebosar, cantos, griteríos, agitación de banderolas. Le regalaron al Papa dos estatuillas con Anuarite e Isidoro Bakanjia, los dos beatos congoleños, mártires. Una de la pureza y otro como catequista. Y había cartelitos diciendo "santi súbito"


Francisco ha estado genial. Genial catequista. Ha hablado de las manos.

Y el gentío se miraba las manos.

- Parecen iguales, pero cada uno de vosotros es único en el mundo. Dios te quiere a ti.

Y empezó a darle un nombre a cada dedo de la mano: el pulgar (la oración), el índice (la comunidad), el corazón (la honestidad) (hizo gritar a los 100.000 jóvenes: ¡no a la corrupción!). el anular (el dedo más débil, el de la alianza, el de las crisis, que se vencen con el perdón), y el meñique (servir nos hace pequeños).

Y para terminar, un último consejo: no os desaniméis nunca.

Les hizo cantar varias veces. Y en un momento todos se pusieron a cantar el himno congolés: Debout Comgolais! que se las trae.

No te puedo contar lo de esta tarde.

Un abrazo

Fede

miércoles, 1 de febrero de 2023

El Papa Francisco en el Congo (2)

 


Segunda pequeña crónica de l'abbé Quirós desde el Congo

1 de febrero 2023 Kinshasa

Querido hermano:

La noche fue larga y rápida. Una pequeña lluvia para empezar y después gran calma en el aeropuerto de Ndolo (en el centro de Kinshasa).

De allí saco una foto que responde al lema del viaje del Papa Francisco: "La reconciliación con Dios".


Los confesonarios estaban repartidos por diferentes zonas:


Y esta mañana, 1 de febrero, el cielo tan despejado que el sol quemaba, como el retablo de una muy buena organización. Todo salió perfecto.

En la homilía: tres fuentes de la paz: El perdón, la comunión y la misión. Misión de paz.

Y dirigiéndose a cada uno: Saca tu crucifijo del bolsillo, del bolso. ¡Bésalo!

¡Bésalo tú también, hombre!

Mira al crucifijo que tienes en casa. Mira sus llagas. Y ve en sus heridas las tuyas y las de tu pueblo. Llaga contra llaga, nos curaremos.

Se siguió el rito romano para las diócesis de Zaire, adaptado para las circunstancias.


Hubo, al final, intercambio de regalos. Un cáliz del Papa para el cardenal y un cuadro con el Papa bendiciendo el mapa del Congo de la parte del cardenal.


Cuando el cardenal Ambongo agradeció al Papa el haber venido y celebrar la Misa, le presentó al pueblo que sufre, que sufre verdaderamente de dolor y miseria. 

Un profesor de la Universidad de Kinshasa me ha confesado que se le saltaros las lágrimas cuando, en la espera del Papa, ese pueblo cantaba y gritaba con fuerza, tal era su fe y su esperanza en la bendición de Francisco. 

Es Jesús que nos bendice.

Un abrazo

Fede


En Nicaragua, como en otros lugares, cuando uno tiene grandes deseos de contar cosas a los familiares, amigos colegas...y no hay tiempo, trata de resumir anteponiendo ese "para no hacerte largo el cuento". Pero ni así...