domingo, 30 de junio de 2013

Simulacro


En Europa comienza el verano. Simpatiquísima la foto que me manda Manolo.

Por estas tierras se acostumbran a hacer simulacros de terremotos, tsunamis, erupciones volcánicas...

La foto la titula Manolo: Simulacro de vacaciones. Magnífico.



jueves, 27 de junio de 2013

Perpetuo Socorro


María del Perpetuo Socorro es un icono bizantino de la escuela cretense, una imagen representativa de la Virgen de la Pasión. La interpretación general es clara:

Los arcángeles Gabriel y Miguel presentan a Jesús Niño los instrumentos de sus sufrimientos futuros. Al contemplar esta dramática visión, el Niño, en su condición de hombre mortal, se asusta y se estremece y en su brusco movimiento busca socorro en los brazos de su Madre, a cuya mano se aferra con fuerza. El susto y movimiento brusco del Niño están expresados por la contorsión de piernas, el repliegue del manto y la sandalia desprendida.

El icono representa la realidad teológica completa de la Redención por la Pasión. Los instrumentos de la Pasión no son sólo presagio de dolor y muerte, aparecen en las manos veladas como trofeo y símbolo de victoria lograda.

Todo icono es espacio de culto y contemplación espiritual. Por eso la Virgen no está mirando al Niño para consolarlo, como sería lo más natural, sino que se sobrepone al dolor de su Hijo y al suyo propio y endulza benignamente su rostro, buscando la complicidad del espectador.

miércoles, 26 de junio de 2013

Aguacero de caridad


En la Misa celebrada con motivo de la fiesta de San Josemaría, poco antes de empezar hubo un fuerte aguacero.
No impidió, por iniciativa de Mons. Silvio Báez, que hiciéramos la procesión de entrada desde la calle, por la puerta principal. Rápidamente hubo quien, atento, protegió con un paraguas a nuestro obispo.

Como la vida de San Josemaría está llena de anécdotas de caridad, que es cariño, me acordé de una de ellas, que narra Pilar Urbano. Vale la pena, aunque un poco larga, recordarla:

"Es un día plomizo y nublado de abril, en 1970. El Padre ha hecho una escapada a Torreciudad, para hacer una romería a la Virgen y, de paso, ver las obras del santuario. Está saludando a los santeros de la ermita antigua, Miguel y Antonia, su mujer, cuando se oye el frenazo en seco de un coche. Todavía con el casco puesto, llega José Manzanos, el aparejador. El Padre le da un abrazo fuerte y cariñoso. Después, cuando se desplace en coche hacia otra zona de las construcciones, se interesará por este chico. Le dicen que 'es un profesional magnífico; pero anda algo descentrado porque acaba de reñir con su novia, cuando estaban ya a punto de casarse...'. El Padre escucha en silencio. No hace ningún comentario.
Están llegando ya a un amplio lugar excavado, donde se alzarán los futuros edificios. Ha roto a llover. Se ponen los impemeables y los chubasqueros. Desde la caseta de obras, los arquitectos, Heliodoro y César, explican detalles de lo que se está cimentando: 'Ahí abajo irán las criptas de los confesonarios...' El Padre mira a un lado y a otro, como si buscase a alguien. En éstas, ve al aparejador José Manzanos, algo apartado del grupo y charlando con Teófilo Marco. Deja a los arquitectos con su explicación - que, en definitiva, es la razón del viaje- y se dirige hacia estos dos. Les agarra del brazo, uno por la derecha y otro por la izquierda, y chanceándose de ellos con simpatía, inicia un paseo despacio...sin importarle un bledo la lluvia. César se acerca por detrás, intentando proteger al Padre con un paraguas. San Josemaría se vuelve, rápido, y le dice:
-¡Pero bueno, César...! ¡Déjate estar, con el paraguas...que parezco el Negus!
El Padre sigue paseando un buen rato con José y con Teófilo, de un lado a otro, en medio del ajetreo de las obras, con el ruido tremendo de las máquinas removedoras de tierra, pisando sobre el barrizal y empapándose con el aguacero.
¿De qué hablaron? Ninguno de los tres lo contó. Lo cierto es que a José Manzanos aquella conversación le sirvió para serenarse, hacer las paces con su novia, y casarse enseguida. Antes escribió al Padre, a Roma, una expresiva carta en la que le agradecía 'todo lo que me dijo aquel día de lluvia en Torreciudad'"

Aclarar que el Negus era el título que recibía el emperador de Etiopía, por aquel entonces Haile Selassie.

Aguacero de caridad, de cariño, de estar pendiente de los demás. De seguro que en la vida de cada uno encontraremos anécdotas, muy corrientes, de fe, de esperanza, de caridad.

martes, 25 de junio de 2013

Sacerdote cien por cien


El sábado fue la celebración solemne por San Josemaría. Presidió la Eucaristía Mons. Silvio Báez, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua, en la Parroquia Jesús de la Divina Misericordia. Nos conmovió a todos por su cariño y su llamada a la fidelidad al mensaje del "Padre": la santidad en la vida ordinaria.

Iré poniendo algunas fotos de la Misa en torno a este 26 de junio.

Hoy, en la víspera, aniversario también de la ordenación de los tres primeros sacerdotes del Opus Dei, he recordado que muchas veces a lo largo de su vida, San Josemaría repitió que quería ser sacerdote y nada más que sacerdote, sacerdote cien por cien, que no aspirara más que a hablar de Dios y a vivir sólo para Dios, que soñara con enamorarse cada vez más de Cristo y entregarse cada vez más en servicio de las almas.

lunes, 24 de junio de 2013

La Tableta


"Preguntaron por señas al padre qué nombre quería que le pusieran. Éste pidió una tableta y escribió: Su nombre es Juan" (Lucas 1, 62-63)

Me hizo sonreír hoy el Evangelio en la fiesta del Bautista, al leer cómo su padre Zacarías pidió una "tableta" ¡el ipad de entonces! y escribió: Juan es su nombre.

viernes, 21 de junio de 2013

El picaporte

 

El amor que hace grande la vida ordinaria, le otorga también una belleza que se plasma en los mismos quehaceres que se realizan, convirtiéndolos en medio de contemplación.

San Josemaría se detiene a ilustrarlo con detalles nimios, aparentemente insignificantes. Por ejemplo, cómo abrir o cerrar una puerta. Se puede hacer sin atención, como algo carente de significado. Pero ese gesto trivial puede ser ocasión de un acto de amor que, si es auténtico, llevará a realizarlo bien, con una sencilla armonía empapada por ese amor:

"Se toma la manilla directamente, se baja del todo, sin brusquedad, y sólo entonces se empuja la puerta, luego se deja subir con suavidad el picaporte; después, para cerrar, lo mismo, pero alzando la manilla cuando ya la puerta está encajada. Así las cosas duran más porque se cuidan; y estarán limpias y en buen funcionamiento, aunque las usemos muchos; y concluye diciendo que esto es oración, si unimos a todo eso una jaculatoria y lo hacemos por amor de Dios. Lo más banal recibe un nuevo significado, la prosa se convierte en endecasílabo. El secreto está en ¡ese cerrar la puerta con amor!

Por cierto, la celebración de la fiesta de San Josemaría en Managua será este sábado, 22 de junio, con una solemne Eucaristía en la Parroquia Jesús de la Divina Misericordia, a las 5 de la tarde, presidida por Mons. Silvio Báez, obispo auxiliar de la Arquidiócesis.

miércoles, 19 de junio de 2013

Rallegramenti! ¡Felicidades!


Me acabo de enterar que el Papa Francisco ha decidido incluir a San José en las otras Plegarias Eucarísticas de la Misa.

Enseguida me he acordado de la devoción especial que por San José sentía el Fundador del Opus Dei:

"Cuando en su discurso de clausura de la primera sesión del Concilio Vaticano II, el pasado 8 de diciembre, el Santo Padre Juan XXIII anunció que en el canon de la misa se haría mención del nombre de San José, una altísima personalidad eclesiástica me llamó enseguida por teléfono para decirme: Rallegramenti! ¡Felicidades!: al escuchar ese anuncio pensé en usted, en la alegría que le habría producido. Y así era: porque en la asamblea conciliar, que representa a la Iglesia entera reunida en el Espíritu Santo, se proclama el inmenso valor sobrenatural de la vida de San José, el valor de una vida sencilla de trabajo cara a Dios, en total cumplimiento de la divina voluntad"

domingo, 16 de junio de 2013

Test de las 5: Gerardo Josué Díaz


Gerardo es el residente más antiguo en Villa Fontana. Estudia Económicas en la UCA y con él comparto muchas veces la cena cuando se nos hace tarde por nuestros horarios. Ha sido fácil que contestara al test.


¿Un lugar?

Volcán Mombacho.
Es el lugar en el que más he contemplado la naturaleza  en su máxima expresión.


¿Un personaje?

Nelson Mandela
Enseña a trabajar pacíficamente, incluso con las personas a quienes no somos agradables.


¿Un sueño?

Una familia como Dios manda
"Solamente lo que es construido sobre Dios, sobre el amor, es durable" (Juan Pablo II)


¿Un descubrimiento?

El Opus Dei
Aprendí a encontrar a Dios en los deberes ordinarios de todos los días, principalmente en el estudio.


¿Un consejo?

No dejes que tus miedos ocupen el lugar que corresponde a tus sueños



viernes, 14 de junio de 2013

Molinero


"Para bien y para mal, la identidad de un hombre está delimitada por su trabajo. Recuérdese, Adán fue creado con un propósito: el de trabajar, ocuparse de la tierra y protegerla, llenarla y someterla... Revisen la guía telefónica. Pasen las páginas y encontrarán interminables columnas de apellidos como Guerrero, Carpintero, Molinero, Herrero, Jurado o Vaquero...

¿Cómo se convirtieron estas palabras en apellidos? Los hombres se identificaban por su trabajo. Alejandro el molinero se convertía en Alejandro Molinero, apellido que lo distinguía de Alejandro el albañil.

Los padres enseñaban su oficio a sus hijos, y con el oficio venía el apellido, el identificador, la propia identidad. Y estos apellidos han permanecido mucho después de que la tecnología dejara obsoletos ciertos oficios"

miércoles, 12 de junio de 2013

Primeras lluvias


Hablábamos de las "primeras misas" y hoy me refiero a "las primeras lluvias" del invierno en Nicaragua que, inmediatamente, han hecho relucir el verde y las flores de nuestro jardín.
Así lo miraba ayer, en la foto.

Además de "verdad" y "bondad", la vida ordinaria tiene una "belleza" propia, es luminosa y bella para el cristiano, como la vida de la Sagrada Familia en Nazaret.

domingo, 9 de junio de 2013

La Concha: Primeras Misas


Los ocho nuevos sacerdotes, ordenados ayer en la Catedral de Managua, han comenzado a celebrar sus Primeras Misas Solemnes. Se han comprometido a concelebrar en todas y cada una de ellas.
Comenzó Miguel de Jesús en La Concha. (La foto muestra el aspecto de la parroquia de ese municipio durante la ceremonia)

A propósito viene bien esta página de una biografía de los hermanos Ratzinger, que fueron ordenados el mismo día:
"En aquel entonces era costumbre que la gente se apuntara en la parroquia para recibir la bendición del nuevo sacerdote...
La bendición de un sacerdote recién ordenado se consideraba algo muy especial. Para recibir la bendición de un nuevo sacerdote vale la pena gastar un par de suelas de zapatos, dice un refrán de Baviera"
"Por primera vez experimentó Joseph Ratzinger con cuánto fervor las personas esperaban su bendición y qué fuerza recibe el sacerdote del Sacramento del Orden sagrado. ¿Qué podría haberles dado él, joven como era, a esas personas? Pero ahora, actuando por encargo de Cristo, lo que podía darles era más de lo que ellas podían contener.
Ahora se ponía de manifiesto la verdad de las palabras de San Pablo que el nuevo sacerdote había hecho imprimir en la estampita de Primera Misa: 'No porque quiera controlar autoritariamente vuestra fe, sino para contribuir a vuestra alegría' (2 Cor 1,24)"

viernes, 7 de junio de 2013

Graduación


¡Qué bueno es Dios. Nos envió a su Hijo, Jesús!
Jesús, a los 5 o 6 años avanzaría en la escuela de Nazaret, en la sinagoga. Su graduación fue hasta los 12 años, cuando sus padres lo llevaron al gran templo de Jerusalén.
Jesús crecía en gracia, en edad y en sabiduría, delante de Dios y de los hombres.

Ahora, en el mes de junio, Jesús bendice a estos niños y niñas de kinder que terminan una etapa y se disponen a pasar a "primaria" en "Altamar" (no en la orilla, sino mar adentro) y en "Maderos" (en la cumbre, donde crecen los árboles altos)

Forman la primera promoción que se gradúa en la nueva sede del colegio. Han ocurrido muchas cosas este curso, muchas historias...como las que contamos en el aula. Entre ellas la elección del Papa Francisco.
Si estuviéramos en Roma la habríamos invitado a nuestra graduación. Y hubiera venido, porque en Buenos Aires visitaba con frecuencia un colegio como el nuestro. Y probablemente jugaría con ustedes, niños, les abrazaría y les colocaría su sombrerito blanco, intercambiado por el birrete que ahora llevan, como hizo hace poco con una niña que se lanzó a saludarle.

Le pido al Señor que este espíritu nuestro, este parecernos a Cristo, la alegría, la humildad, el trabajo hecho por amor, la pobreza, la generosidad, la amistad...se vaya propagando, vaya creciendo en estos niños y niñas que se gradúan hoy.
Crecen en edad, en sabiduría...pero lo que más queremos es que crezcan en gracia de Dios.
Todas estas razones son las que nos empujan a llevar adelante nuestros colegios.
Felicidades a los papás y mamás, a las familias de estos niños y niñas. No duden de que Dios les bendice en sus hijos e hijas.

En Nicaragua, como en otros lugares, cuando uno tiene grandes deseos de contar cosas a los familiares, amigos colegas...y no hay tiempo, trata de resumir anteponiendo ese "para no hacerte largo el cuento". Pero ni así...