jueves, 28 de junio de 2018

Oración de un niño


Oración de un niño:

¡María!

Te pido por los malos, para que se hagan buenos

Y por los buenos, para que sean simpáticos

miércoles, 27 de junio de 2018

Ciudad de las almas felices


Con motivo de la publicación de un nuevo y apasionante libro titulado: "El último romántico. San Josemaría en el siglo XXI" he leído una entrevista a su autor, Mons. Mariano Fazio (Buenos Aires, 1960)

Mons. Mariano Fazio, vicario general de la Prelatura explica que no es una biografía sobre el fundador del Opus Dei, ni un estudio teológico, ni una recopilación de textos, sino que se trata de presentar de forma ordenada algunas de las consecuencias de la luz recibida por san Josemaría hace noventa años, y que hoy cobran relevante actualidad.

El libro parece, pues, interesantísimo porque las propuestas de San Josemaría proceden del Evangelio y por eso son tan necesarias para el siglo XXI: la alegría de ser hijos de Dios, el trabajo como lugar de santidad, el carácter positivo de la secularidad, la importancia de la vida familiar y del amor, el valor de la pluralidad, la repercusión social de la vida de cada cristiano...

En la entrevista se comienza con una pregunta y una respuesta que hacen pensar:

- Conoció a san Josemaría en Argentina. ¿Qué recuerda de aquel encuentro?

- Recuerdo a un sacerdote que lució una sonrisa de oreja a oreja, y que transmitía con naturalidad una gran alegría; sus palabras eran positivas, animantes, comprensivas, y, a la vez, amablemente exigentes. La sonrisa de su rostro quedó grabada en mi memoria y en mi imaginación, y ha supuesto un aliciente para procurar sonreír, también cuando aparentemente no hay motivos para hacerlo.


Yo tenía apenas catorce años y sabía muy poco del Opus Dei. Allí había muchos estudiantes y universitarios, todos con ganas de grandes ideales. Tengo que reconocer que recuerdo pocas cosas de las que nos dijo san Josemaría, pero una frase me quedó grabada en el corazón: "Buenos Aires tiene que ser la ciudad de las almas felices".

Regresé a casa con un horizonte existencial distinto del que tenía antes de mi encuentro con él.


martes, 26 de junio de 2018

Fiesta de San Josemaría


Hoy, 26 de Junio, es la fiesta de San Josemaría.

Copio algunos fragmentos de la homilía que pronuncié el pasado sábado con motivo de esta festividad en Managua, en momentos ciertamente críticos en toda Nicaragua. De hecho, algunos no pudieron desplazarse por la capital debido a la presencia de grupos paramilitares:

- Dentro de pocos días, el martes 26, se va a celebrar, en el calendario de la Iglesia Universal, la fiesta de San Josemaría. Nosotros nos anticipamos en esta mañana, aquí en la Iglesia del Santo Cristo de Las Colinas, debido a las circunstancias por las que atraviesa nuestra amada patria.
No podemos celebrarla con la solemnidad de otras ocasiones. Esta vez, la solemnidad es, sobre todo, interior. Consiste en unirnos de corazón a Nuestro Señor Jesucristo para dar gracias a Dios Padre por la Obra y por el instrumento fidelísimo que utilizó para llevarla a cabo.

Como en toda Eucaristía hemos comenzado por escuchar atentamente la Palabra de Dios. Tal como la escucharon los apóstoles y muchas gentes de los alrededores del lago de Genesaret: "Cuando acabó de hablar, dijo a Simón: Rema mar adentro y echen las redes para pescar" Simón Pedro reaccionó con fe: "Maestro, nos hemos pasado la noche bregando y no hemos cogido nada; pero por tu Palabra, echaré las redes"


San Josemaría, nuestro Padre, también fue un hombre de fe ante lo que el Señor le pedía.
Le pedía abrir caminos de santidad en el mundo, en el trabajo profesional, en el cumplimiento de los deberes ordinarios del cristiano... ¡Y tuvo fe!
A pesar de ser muy joven (26 años, recién ordenado sacerdote) no dudó de ese querer de Dios. Y se puso "manos a la obra" como se ha recogido literalmente en el evangelio de San Lucas.
Tan cierto estaba, que ya desde el primer momento, arreció en la oración y en el sacrificio. Le pedía a su confesor permiso para aumentar sus penitencias, porque es menester -decía- que sea "maestro y guía de santos"

Santos de verdad, canonizables. Y en la vida ordinaria.
Cuando alguna vez he visitado a las Hermanas Clarisas en su Monasterio de Ciudad Darío, en el locutorio me llama la atención un cuadro grande de la familia franciscana: la cantidad de santos que tienen ya canonizados... Pero son todos frailes o monjas... Y de siglos pasados...

El mensaje del Opus Dei es la santidad de TODOS.
Y Josemaría tuvo fe...
Y se está realizando ese querer de Dios por su fe, por su correspondencia:
Fue emocionante su canonización el 6-X-2002: el santo de lo ordinario.
Y, después, Álvaro...
Y ahora, Guadalupe Ortíz de Landázuri... Dice el Espíritu Santo, a través del Papa Francisco que "Guadalupe se entregó por entero y con alegría a dios y al servicio de su Iglesia, experimentando intensamente el amor divino"
Y Guadalupe es fruto de la fe de San Josemaría. Ella misma apuntaba en su agenda, una de las muchas veces que compartió con el Padre: "Su fe fuerte arrastra la mía"
Y Guadalupe va a subir a los altares porque convirtió todas sus tareas en lugar de encuentro con Cristo: la labor de investigación en Química, las clases en distintos centros de enseñanza, la administración doméstica, la dirección de residencias universitarias etc. Su santidad se fraguó en la correspondencia a la gracia divina en la vida diaria, en el apostolado y en el afán por buscar la promoción humana de los más necesitados.

Y así, muchos. No sé qué fecha elegirá la Santa Sede para celebrar a Guadalupe (12 diciembre, su nacimiento; 16 julio, su marcha al cielo; 5 marzo, cuando llegó a México para comenzar el trabajo apostólico de las mujeres del Opus Dei en América...) Pronto vamos a llenar el calendario de celebraciones. Y con razón, porque la mayor alegría es conocer a Jesucristo y encontrarlo en nuestro propio ambiente, todos los días y a todas horas.

Y esto, gracias a la fe de nuestro padre, que hemos heredado. Por eso, nuestro agradecimiento a Dios, hoy, ha de ir unido a este desafío, a esta bonita responsabilidad de los que estamos aquí: seguir llevando a cabo la Obra de Dios con fe.

Un aspecto de esa fe, tal como la vivió San Josemaría, nos es especialmente necesaria en los  momentos actuales. Me refiero a la conciencia que tenía San Josemaría de que todo es para bien. Y cómo encaraba las dificultades con visión sobrenatural.
Nuestro Padre tenía una fe que era un asentimiento indiscutido al Señor y que le daba a la vez una confianza plena en que la voluntad de Dios era lo mejor.
Repetía mucho la enseñanza de San Pablo de que para los que aman a Dios "todo es para bien"
Esto es un acto de fe profundo. Y es lo que hoy pedimos a Jesús: Vivir esa confianza, esa certeza, de que precisamente cuando las cosas se han puesto difíciles, muy complejas, dolorosas, desgarradoras para tantas gentes, Dios nos da su gracia para ahogar el mal en abundancia de bien, para que venza el amor, para que haya muchos frutos de santidad en Nicaragua y desde Nicaragua.

San Josemaría afirmaba -con una de esas expresiones espontáneas de su alma- que tenía la seguridad de lo imposible.
Nosotros le pedimos a Jesús también esa seguridad de lo imposible. Que ante las dificultades que estamos viviendo, hoy, aquí, ahora, alcancemos gracias innumerables que ensanchen nuestro corazón e iluminen nuestro entendimiento para abrir, más y más, caminos de santidad entre nuestros iguales... Contando, además, con esa casa de retiros y convivencias -El Carrizal- que se abrirá en cuanto acabe pronto el conflicto que desde hace dos meses aflige a Nicaragua.
Nos acompaña la oración, llena de fe -herencia del Fundador- del Prelado del Opus Dei y de tantas personas que se unen a sus intenciones.

¿Te da seguridad la oración? ¿Tienes fe en la oración? ¿Pones ese medio -la oración- para todo?

Lo pedimos por intercesión de San Josemaría, a quien conocemos todos los que estamos aquí como Padre, o al menos como padrino... ¡Qué bueno es conocer y meditar su vida y sus enseñanzas!

En esa su biografía, destaco algo evidente: su amor sincero, claro, contagioso por cada uno...
En una situación muy difícil, más aún de la que nosotros estamos viviendo, alguien le preguntó:
- Josemaría ¿necesitas algo? ¿estás bien?...
(Preguntas que nos hacemos mucho estos días: ¿cómo estás? ¿algún percance? ¿hay pasada? ¿cómo están las cosas por ahí?...)
Pues ante esa pregunta: Josemaría ¿quieres alguna cosa? Contestó:
- "Yo te quiero a ti. No necesito nada. Solo deseo que seas un hombre bueno y justo"

El amor de dios emplea muchos cauces. Uno bien valioso es esa gracia de la paternidad que Dios concedió a San Josemaría para que nosotros, cada uno, cada una, viva con alegría el camino de la santidad, tal como se lo vamos a pedir al Señor cuando la hayamos recibido en la Comunión:

"Señor Dios nuestro, los sacramentos que hemos recibido en la celebración de San josemaría, fortalezcan en nosotros el epíritu de hijos, para que fielmente unidos a tu voluntad, recorramos con alegría el camino de la santidad..."

En ello está implicada la Virgen, Reina de Nicaragua, como la invocó nuestro Padre cuando sobrevoló en 1975 el cielo azul y blanco de nuestro hermoso país.

Así sea.

lunes, 25 de junio de 2018

Sacerdotes


Hoy es el aniversario de la Ordenación Sacerdotal de los tres primeros sacerdotes del Opus Dei: Álvaro del Portillo, José María Hernández Garnica y José Luis Múzquiz (por ese orden en la foto de aquel lejano 25 de junio de 1944)

Los tres, camino hacia los altares, supieron responder con generosidad a la llamada específica de Dios, y su vida estuvo centrada en la Santa Misa, siempre también muy unidos a san Josemaría, Fundador del Opus Dei, que depositó en ellos una gran confianza.


Dios Padre misericordioso, que concediste al Beato Álvaro, Obispo, la gracia de ser, con la ayuda de Santa María, Pastor ejemplar en el servicio a la Iglesia y fidelísimo hijo y sucesor de San Josemaría, Fundador del Opus Dei: haz que yo sepa también responder con fidelidad a las exigencias de la vocación cristiana, convirtiendo todos los momentos y circunstancias de mi vida en ocasión de amarte y de servir al Reino de Jesucristo. Dígnate otorgar la canonización del Beato Álvaro, y concédeme por su intercesión el favor que te pido... (Pídase)
(Yo pido por la santidad de todos los sacerdotes de Nicaragua y del mundo entero)
Padre Nuestro, Ave María, Gloria,


Señor, Dios nuestro, que has querido contar con tu siervo José María, sacerdote, para extender en diversos lugares del mundo la llamada a santificarse en la vida ordinaria, ayúdame a seguir a Jesucristo y a tratarle en mis ocupaciones cotidianas, para llevar la alegría de la vocación cristiana a otras muchas almas. Glorifica a tu siervo José María y concédeme por su intercesión el favor que te pido... (Pídase)
(Yo pido por la santidad de todos los sacerdotes de Nicaragua y del mundo entero)
Padre Nuestro, Ave María, Gloria


Oh Dios, que ayudaste a tu siervo José Luis a trabajar con generosidad y sencillez, difundiendo entre muchas personas el mensaje de santidad en la vida corriente, y enseñando a encontrar la alegría y la paz en su vida diaria. Ayúdame a buscar en primer lugar el Reino de Dios, santificándome en el trabajo y dedicándome generosamente a la salvación de las almas. Dígnate glorificar a tu siervo José Luis, y concédeme, por su intercesión, el favor que te pido... (Pídase)
(Yo pido por la santidad de todos los sacerdotes de Nicaragua y del mundo entero)
Padre Nuestro, Ave María, Gloria.

domingo, 24 de junio de 2018

Golazo de Panamá


Panamá, tal vez la selección más débil del Mundial, ha jugado su segundo partido ante Inglaterra sufriendo una dura derrota (6-1)

Antes de saltar al césped se vivió uno de los momentos más tiernos del Mundial.

Una niña de las que acompañan a los jugadores en la salida al campo, visiblemente emocionada, no pudo evitar las lágrimas de emoción e incluso tuvo que ser consolada por los jugadores panameños.

¡Golazo de Panamá!

(Vale la pena buscar el video completo)

Nos gusta crecer


Al leer hoy el Evangelio en la fiesta de san Juan Bautista y llegar  donde se dice que se preguntaban impresionados:

"¿Qué va a ser de este niño? Esto lo decían, porque realmente la mano de Dios estaba con él.
El niño se iba desarrollando físicamente y su espíritu se iba fortaleciendo..." (Lucas 1, 80)

Me he acordado del comentario reciente de las niñas del colegio donde estuve de capellán en Canarias por muchos años:

¡¡¡ NOS GUSTA CRECER !!!

sábado, 23 de junio de 2018

Padre nuestro


La oración vocal por excelencia es la que nos viene del mismo Jesucristo:

"Ustedes, pues, oren así: Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu nombre..." (Mateo 6, 9)

Y en una catequesis hace muchos años, animaba así san Josemaría para esforzarnos por penetrar el sentido de las palabras:

"Díselo al Señor. Dile: voy a rezar y querría hacerlo bien; te pido que me ilustres, que me ayudes, para que me dé cuenta de lo que dice el Padrenuestro.

Comienzas: Padre. Y te detienes a considerar un ratito qué quiere decir esta palabra. Piensas en lo que es para ti tu padre, y que además de ese padre de la tierra tienes otro en el Cielo: Dios. Y te llenas de orgullo santo.

Padre nuestro. No sólo es tuyo: es nuestro, de todos. Luego tú eres hermano de las demás criaturas que hay en la tierra. Por tanto, debes querer a la gente, debes ayudarles a ser buenos hijos de Dios, porque todos juntos constituimos la familia de nuestro Padre del Cielo.

Que estás en los cielos... Y enseguida recuerdas lo que me has oído decir: que está también en el Sagrario y en nuestra alma en gracia..."

(Bellas algunas imágenes las que nos ofrece el Mundial de fútbol

viernes, 22 de junio de 2018

Buen padre


Santo Tomás Moro fue un muy buen padre. Escribía a sus hijos -por su cargo de Canciller de Inglaterra debía permanecer tiempo fuera de casa- casi a diario.

Cuando, teniendo 13 años, Margaret le pide dinero -no sabemos con qué fin- Tomás le responde:

"Pides a tu padre dinero con demasiada timidez y moderación, mi querida Margaret si sabes que siempre me alegro de poder dar...

Te mando ahora solamente la cantidad deseada; en verdad me gustaría adjuntar algo más; pero si puedo volver a dar, también puedo volver a deleitarme con la alegría de dar.

Pues me gusta que mi hija me pida y me halague un poco; su virtud y su sabiduría me hacen quererla en especial.

Cuanto antes gastes esta suma en tu manera usual, cuanto antes me vuelvas a pedir más, tanto mayor será mi placer"

(Mañana, 23 de Junio, es el "día del padre" en Nicaragua)

lunes, 18 de junio de 2018

Las tres respuestas de Dios


Buen descubrimiento el de aquel hombre, fruto de un rato de oración, y que quiso compartir.

Decía contento que había aprendido que Dios solo tiene tres respuestas posibles:

-

- Todavía no

- Tengo algo mejor para vos

Me pareció muy acertado y lo tendré siempre en cuenta. ¡Gracias!

(En la foto, una vista preciosa de la Catedral de León, Nicaragua)

sábado, 16 de junio de 2018

Diálogo y Comunicación


Marco ha participado en el Congreso #churchcom18, sobre diálogo, respeto y libertad de expresión en la Iglesia.

Copio de algunas de sus notas, muy interesantes:

- El peligro de una mente cerrada consiste en ser sorda a las ideas de otros, a nuevas soluciones.

- Podemos no estar de acuerdo en muchas cosas, pero deberíamos estar de acuerdo en promover la libertad de expresión.

- El primer paso para apostar por la actitud dialógica es pasar de la adrenalina del contexto "amenaza" al entusiasmo del contexto "oportunidad"

- ¿Mi discurso aporta connotaciones positivas?

- El éxito de un evento no son las menciones en medios de comunicación sino comunicar con las personas.

- Contagiar, inspirar, unir en el pluralismo, provocar cambio, acercar, dialogar...

- Expresar valores de modo amable, no hostil...

Ahí queda...

miércoles, 13 de junio de 2018

Abundancia de bien


Alguien me preguntó recientemente: ¿Es posible esperar una victoria sobre el mal? ¿Es posible, sobre todo, esperar una victoria sobre el inmenso sufrimiento causado por los hombres con sus acciones injustas?

Y, providencialmente, gracias a Giorgio encontré una respuesta:

El cristiano da una respuesta positiva a estas preguntas, y no porque disponga de respuestas "racionales" al problema del mal -que es y sigue siendo algo carente de sentido- o de recetas fáciles para eliminarlo, sino porque puede referirse como modelo a Cristo y a su respuesta: sólo es posible vencer al mal contraponiéndole el bien.

Quien en Jesús y a través de Jesús haya reconocido en acción la fuerza del amor de Dios a los hombres será también capaz de disponer de ánimo abierto, de sentir pasión por el hombre y de realizar obras  -tal vez pequeñas en apariencia- que dejan entrever, no obstante, la posibilidad de una tierra más justa.

Ahogar el mal en abundancia de bien.

martes, 12 de junio de 2018

Giulia: Descubrir la Misa


Giulia es una joven universitaria de Bolonia (en la foto, con los hijos de la familia que la acogió en los EEUU)

Cursa el primer año de "Lengua y Literatura Extranjera". Antes de incorporarse a la Universidad, ganó una beca que le permitió elegir un destino en cualquier lugar del mundo para pasar un año en una escuela extranjera.

"Escogí los Estados Unidos", dice Giulia, "pero no me dieron la posibilidad de especificar el destino. Así que acabé en una pequeña ciudad llamada Palestine, en Texas.

La gran mayoría de los habitantes de Palestine son protestantes. "Antes de esa experiencia, en Bolonia, iba a Misa los domingos porque mis padres también asistían. Asistía, pero con pocas ganas. La familia que me acogió en los EEUU era muy religiosa, por lo que me invitaron a acompañarles a sus funciones religiosas y fui".

No hay iglesias católicas en Palestine. La más cercana está a varias horas en coche y Giulia no disponía de uno. Aunque conservan algunas semejanzas , las asambleas dominicales protestantes son diferentes de la Misa católica: "Un pastor lee un pasaje de las Sagradas Escrituras y lo explica a los fieles reunidos. Luego cantan unas canciones muy bonitas. En la congregación protestante a la que acudíamos tenían una cantante y un pianista realmente buenos".

"A pesar de este hermoso clima -continúa Giulia-, cuando fui a su celebración la primera vez, me sentí un poco 'vacía', como si únicamente hubiese participado en una fiesta agradable. Me faltaba algo. Sentí una sincera nostalgia por 'mi' Misa,la católica. De repente comprendí que era algo más que una costumbre dominical".

La dimensión religiosa en estas realidades se experimenta de una manera muy viva y estimulante: "Recuerdo que, en muchas ocasiones, charlaba con ellos con mucha naturalidad sobre temas de fe".

"Me di cuenta de que había 'vuelto a casa' cuando finalmente fui a Misa el primer domingo después de regresar a Italia: era como si fuera la primera vez".

"Ahora -concluye Giulia- intento que la Misa sea para mí no algo, sino un encuentro con Alguien".

(Hoy, en la Misa celebrada aquí en Nicaragua, en la Oración sobre las Ofrendas, suplicaba: "Señor, que el sacrificio salvador de tu Hijo, Rey pacífico, ofrecido bajo estos signos sacramentales de paz y de unidad, sirva para estrechar la concordia entre todos tus hijos...")

lunes, 11 de junio de 2018

"Dar lo mejor de uno mismo"


Interesante reflexión del Papa Francisco sobre el deporte:

"El deporte es un lugar de encuentro donde personas de todo nivel y condición social se unen para lograr un objetivo común.

 En una cultura dominada por el individualismo y el descarte de las generaciones más jóvenes y de los más mayores, el deporte es un ámbito privilegiado en torno al cual las personas se encuentran sin distinción de raza, sexo, religión o ideología y donde podemos experimentar la alegría de competir por alcanzar una meta juntos, formando parte de un equipo en el que el éxito o la derrota se comparten y se supera; esto nos ayuda a desechar la idea de conquistar un objetivo centrándonos solo en uno mismo.

 La necesidad del otro abarca no solo a los compañeros de equipo sino también al entrenador, los aficionados, la familia, en definitiva, todas aquellas personas que con su entrega y dedicación hacen posible llegar a dar lo mejor de uno mismo.

Dar lo mejor de uno mismo en el deporte, es también una llamada a aspirar a la santidad.

Es necesario profundizar en la estrecha relación que existe entre el deporte y la vida, para que puedan iluminarse recíprocamente, para que el afán de superación en una disciplina atlética sirva también de inspiración para mejorar siempre como persona en todos los aspectos de la vida. Tal búsqueda, con la ayuda de la gracia de Dios, nos encamina a aquella plenitud de vida que nosotros llamamos santidad.

El deporte es una riquísima fuente de valores y virtudes que nos ayudan a mejorar como personas. Como el atleta durante el entrenamiento, la práctica deportiva nos ayuda a dar lo mejor de nosotros mismos, a descubrir sin miedo nuestros propios límites, y a luchar por mejorar cada día. De esta forma, en la medida en que se santifica, cada cristiano se vuelve más fecundo para el mundo.

Para el deportista cristiano, la santidad será entonces vivir el deporte como un medio de encuentro, de formación de la personalidad, de testimonio y de anuncio de la alegría de ser cristiano con los que le rodean"

( Alguien, recordando el punto 11 del libro "Camino", que habla de Voluntad, Energía, Ejemplo... me comentaba que sin ese sacrificio, sin esa constancia en los entrenamientos... Rafa no hubiera podido ganar 11 veces "Roland Garros" )

( Ah! seguimos con ese espíritu buscando lo mejor para Nicaragua y el mundo entero )

domingo, 10 de junio de 2018

Graduados


En medio de la tribulación por la que estamos pasando en Nicaragua, nos llegan buenísimas noticias desde las Facultades Eclesiásticas de la Universidad de Navarra, donde desde hace varios años sacerdotes y seminaristas nicaragüenses realizan estudios institucionales y de especialización.

Esas noticias buenas se refieren a la conclusión exitosa de esos estudios. Así, se acaba de graduar en Derecho Canónico el Padre Rodolfo José López, de la Arquidiócesis de Managua (en la foto, a la derecha en la fila de atrás)

Cuenta el Padre José Rodolfo que cuando el Cardenal Brenes, su obispo, le pidió que estudiara Derecho Canónico le asustó la idea, pero terminó "agarrándole el sabor"

"Para quienes nos hemos formado en el ámbito de la Teología -añade- y no estamos acostumbrados al lenguaje jurídico, el estudio del Derecho Canónico resulta al principio un poco difícil, pero poco a poco te vas familiarizando con él. Además, te das cuenta de que es muy útil para ayudar a los Obispos en su gobierno"

Tal y como asegura, la oportunidad de haber estudiado en Pamplona ha sido "muy valiosa", por eso quiere agradecer "de corazón" la ayuda prestada por los benefactores. (Benefactores -añado yo- tanto de España, como de aquí de Nicaragua a los que les estamos pidiendo esas ayudas económicas)

"Su apertura -dice sobre los benefactores- y generosidad en el amor a Cristo está siendo de gran beneficio para la Iglesia. Y Dios se lo recompensará siempre. Aunque Él puede hacer todo sin necesidad de nosotros, quiere que participemos con pequeños actos de generosidad salidos del corazón. Estas personas que nos ayudan con nuestra formación se han anotado un punto en el Cielo"

¡Bien, Padre Rodolfo José! Le esperamos pronto en Nicaragua.


Igualmente se graduó de Bachiller en Teología el ya diácono Francisco Rivas Tobar, natural de San Jorge, de la Diócesis de Granada (difícil de localizar en la foto pues se escondió muy al fondo)

Francisco ha cursado durante cuatro años los estudios institucionales de Teología en el Seminario Internacional Bidasoa, habiéndose ordenado de diácono hace pocos meses. Ahora también le esperamos de vuelta para trabajar en su Diócesis de Granada.

¡Bien, Diácono Francisco!

viernes, 8 de junio de 2018

¿Felicidad?


Cualquiera podría decir: "yo lo que quiero es ser feliz"

Y sin embargo algo falla, porque con frecuencia el ser humano no consigue alcanzar la felicidad.

Los hombres mueren y no son felices, sentenciaba con cierto pesimismo un escritor ateo del siglo XX. Y puede que nos hayamos preguntado interiormente: "Señor, ¿qué pasa?"

El plan de la Creación incluía nuestra felicidad, pero algo falló. No siempre conseguimos ser felices y, a menudo, quizás por eso mismo, tampoco logramos hacer felices a los demás. Es más, no raramente causamos sufrimientos unos a otros, actuando de una manera cruel y perversa.

¡Cuánto dolor, cuánta crueldad! Pero, ¿es posible que nosotros los hombres, creados a semejanza de Dios, seamos capaces de hacer estas cosas?

¿Qué pasa? ¿Por qué tanta gente no es feliz? ¿Por qué realidades que prometen tanta felicidad -la amistad, los lazos familiares, las relaciones sociales, las cosas creadas- son a veces fuente de tanta insatisfacción, amargura y tristeza? ¿Cómo es posible que los hombres seamos capaces de producir tanto daño?

Las respuestas a estas punzantes y dolorosas preguntas se concentran en una palabra: el pecado.

En griego, la lengua del Nuevo Testamento, "pecado" se dice hamartia, qu significa: "Fallo de la meta, no dar en el blanco", y se aplicaba especialmente al guerrero que fallaba el blanco con su lanza.

Así pues, un primer sentido del pecado es errar el blanco. Lanzamos una flecha dirigida a la felicidad, pero fallamos el tiro. En este sentido el pecado es un error, una trágica equivocación y, a la vez, un engaño: buscamos la felicidad donde no está (como la fama o el poder), tropezamos en nuestro camino hacia ella (por ejemplo, acumulando bienes superfluos que ciegan nuestro corazón a las necesidades de los demás) o, peor aún, confundimos nuestro anhelo de felicidad con otro amor (como el caso de un amor infiel).

Pero siempre, detrás del pecado está la búsqueda de un bien -real o aparente- que pensamos que nos hará felices.

No comprenderemos el pecado mientras no sepamos detectar el anhelo de felicidad insatisfecho que lo genera.

A veces, un deseo vehemente de algo que es pecado procede de una carencia en el deseo fundamental de amor, que provoca angustia y tristeza, y que se piensa -erróneamente- resolver de ese modo. Por ejemplo, quien se siente poco querido y carece de vínculos afectivos firmes, ya sea con Dios, la propia familia o los amigos, fácilmente reaccionará con desconfianza y agresividad, incluso con injusticia, ante las pretensiones ajenas, para protegerse y asegurarse; o buscará un sucedáneo de ese amor en las relaciones de usar y tirar, el placer o las cosas materiales.

Solo el amor de Dios sacia.

Benedicto XVI lo expresó así: "La felicidad es algo que todos quieren, pero una de las mayores tragedias de este mundo es que muchísima gente jamás la encuentra, porque la busca en lugares equivocados. La clave para esto es muy sencilla; la verdadera felicidad se encuentra solo en Dios. Necesitamos tener el valor de poner nuestras esperanzas más profundas solamente en Dios, no en el dinero, la carrera, el éxito o en nuestras relaciones personales sino en Dios. Sólo Él puede satisfacer las necesidades más profundas de nuestro corazón"


jueves, 7 de junio de 2018

Desde Sicilia


Desde Sicilia, en una breve visita pastoral, Mons. Ocáriz nos ofrece consejos prácticos aplicables en muchos sitios.

Sobre el modo de vivir un noviazgo cristiano en una sociedad que pone tantas dificultades:

- "En primer lugar, tienes que creer firmemente que vale la pena vivir el noviazgo de manera cristiana, por ejemplo, decidiendo tener con tu novia una relación casta. No se trata simplemente 'negarnos' algo que nos gustaría pero que nos obligamos a postergar en el tiempo, no. Se trata de afirmar positivamente el amor, confiar en que Dios lo quiere así, y que de este modo Él es feliz, porque a vosotros esa preparación os hace más felices"


Sobre la formación profesional:

- "Cuando se ofrece una buena formación profesional y humana, ningún esfuerzo se pierde" Muchas personas que han pasado por la escuela de hostelería agradecen con el pasar de los años lo aprendido, que no solo les ha ayudado a encontrar trabajo, sino también en su vida personal y de fe.


Y algo al vuelo, que nos sirve en estos momentos para Nicaragua:

- "La esperanza no está fundamentada en nuestras fuerzas, sino en el amor de Dios por nosotros"

lunes, 4 de junio de 2018

Octava del Corpus: Un mundo de Dios


Me maravilla comprobar como, año tras año, va cogiendo más auge la fiesta solemne del Corpus Christi, no sólo en lugares tradicionales como Las Palmas de Gran Canaria (en la foto, la alfombra ante la fachada de la Catedral) sino también en ciudades, pueblos, aldeas, rincones de todo el planeta.

Pero al día del Corpus sigue la Octava del Corpus, ocho días que concluyen con la fiesta del viernes del Corazón de Jesús.
Se nos invita, y que grato es hacerlo, a meditar en el gran Misterio de la Eucaristía,

Hoy lo hacía con unas palabras de una homilía del Papa Emérito Benedicto XVI, que vienen como anillo al dedo, especialmente para nuestra querida Nicaragua que anhela una transformación, un cambio a mejor:

"Al agradecer y bendecir, Jesús transforma el pan, y ya no es pan terrenal lo que da, sino la comunión consigo mismo.

Esta transformación, sin embargo, quiere ser el comienzo de la transformación del mundo.

Para que llegue a ser un mundo de resurrección, un mundo de Dios.

                                               (Misa del Corpus en el Salto. Nicaragua)

Sí, se trata de transformación.

Del hombre nuevo y del mundo nuevo que comienzan en el pan consagrado, transformado, transubstanciado."
En Nicaragua, como en otros lugares, cuando uno tiene grandes deseos de contar cosas a los familiares, amigos colegas...y no hay tiempo, trata de resumir anteponiendo ese "para no hacerte largo el cuento". Pero ni así...