jueves, 2 de febrero de 2023

El Papa Francisco en el Congo (3)

 


2 de febrero 2023 por la mañana

Querido hermano:

Dos días antes de la llegada del Papa Francisco, una tormenta nocturna derribó el pódium instalado en el estadio de los Mártires, donde hoy los jóvenes y los catequistas se han reunido en masa, en torno a la esperanza.

Aquí la foto con el pódium tras la ventolera que lo tiró abajo:


Congo joven. Creciendo. No nos creemos que seamos capaces de una organización tan buena como la de ayer en el aeropuerto Ndolo, en el centro de la ciudad. Pues bien, hoy los jóvenes del mundo estaban en el estadio de los Mártires, con el pódium rehecho en tan poco tiempo. El locutor se ha atrevido a decir que la próxima JMJ debe ser en el Congo.


Ayer vimos, estremeciéndonos, el testimonio de las víctimas del Este. Niños, mujeres, ancianos, ciegos y cojos, consolados por Francisco.

Nos dejó dos "NO" y dos "SÍ"

NO a la violencia y a la resignación; SÍ a la reconciliación y a la esperanza. Esperanza que se llama Jesús, Jesús.


Hemos visto conmovidos cómo víctimas elevaban los brazos para mostrar que no tenían manos, amputadas. Y presenciamos cómo depositaban al pie de la Cruz, machetes, martillos y barras de hierro con los que habían sido heridos. El Papa estaba dolorosísimo: Cometer violencia contra una madre es hacerlo contra Dios.


Y hoy la fiesta. Las calles de Kinshasa, los caminos agujereados, rebosan de alegría cuando Francisco pasa. Es el Evangelio. Sembrador de Paz.


El estadio, de 80.000 plazas estaba a rebosar, cantos, griteríos, agitación de banderolas. Le regalaron al Papa dos estatuillas con Anuarite e Isidoro Bakanjia, los dos beatos congoleños, mártires. Una de la pureza y otro como catequista. Y había cartelitos diciendo "santi súbito"


Francisco ha estado genial. Genial catequista. Ha hablado de las manos.

Y el gentío se miraba las manos.

- Parecen iguales, pero cada uno de vosotros es único en el mundo. Dios te quiere a ti.

Y empezó a darle un nombre a cada dedo de la mano: el pulgar (la oración), el índice (la comunidad), el corazón (la honestidad) (hizo gritar a los 100.000 jóvenes: ¡no a la corrupción!). el anular (el dedo más débil, el de la alianza, el de las crisis, que se vencen con el perdón), y el meñique (servir nos hace pequeños).

Y para terminar, un último consejo: no os desaniméis nunca.

Les hizo cantar varias veces. Y en un momento todos se pusieron a cantar el himno congolés: Debout Comgolais! que se las trae.

No te puedo contar lo de esta tarde.

Un abrazo

Fede

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En Nicaragua, como en otros lugares, cuando uno tiene grandes deseos de contar cosas a los familiares, amigos colegas...y no hay tiempo, trata de resumir anteponiendo ese "para no hacerte largo el cuento". Pero ni así...