sábado, 28 de septiembre de 2013

Pobreza cristiana


"No podéis servir a Dios y a la riquezas" (Mateo 6, 24), advirtió el Señor a sus discípulos. Y también les dijo: "Es difícil que un rico entre en el Reino de los cielos" (Mateo 19, 23).

"La vida y las energías humanas son cortas. No se pueden dedicar a muchas cosas. Todos necesitamos bienes y dinero para vivir. Lo malo y desviado es dejarse robar el corazón por el afán de tener más, y pasarse la única vida que tenemos amando cosas en lugar de amar a Dios y a las personas que nos rodean. Porque estamos hechos para amar a personas y no a cosas".


2 comentarios:

Alfredo Quirós dijo...

La foto es de nuevo de Monteagudo, el Sagrado Corazón que mira a la ciudad y vega de Murcia.

Anónimo dijo...

AQUI SI QUE LE DOY TODA LA RAZÓN...SI FUERAMOS MENOS PERSONA Y MÁS HUMANO PARA APRENDER DE UNA VEZ POR TODAS DEL PASADO, ESTARIAMOS VIVIENDO DEL VERDADERO AMOR.

En Nicaragua, como en otros lugares, cuando uno tiene grandes deseos de contar cosas a los familiares, amigos colegas...y no hay tiempo, trata de resumir anteponiendo ese "para no hacerte largo el cuento". Pero ni así...