Una anécdota simpática del Japón: A un occidental que pasaba unos días en aquellas tierras le llamó la atención un gesto bonito al final de un partido de fútbol con muchachos de bachillerato del Colegio Mikawadai de Nagasaki: La reverencia que al final del partido hicieron los dos equipos al árbitro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario