Hoy hace justo treinta años de esta foto. Primera Misa solemne del recién ordenado en el Santuario de Nuestra Señora de la Fuensanta.
En la homilía, mi hermano, sacerdote igualmente, entre otras cosas decía: "¡Qué bueno es Dios!... Fijaros cómo nos ha querido: quiere primero que nazcamos en una familia buena donde
sea natural querer a papá y a mamá... Saberse querido por una familia buena, aprender a querer a Dios y a los demás en una familia cristiana, es éste el primer regalo que nos hace Dios para colarse en nuestra vida y mostrarnos su Bondad, con naturalidad. ¡Qué difícil es encontrarse con Dios fuera de ese ambiente!"
3 comentarios:
¡Qué guapa está su madre, padre Alfredo!
difícil pero no imposible!!
¡Qué jovencico¡Enhorabuena.Parece mentira que hayan pasado treinta años.
Felicidades.Rosa
Nos gustó mucho vuestra visita a Murcia.Ahora tendremos que pensar en devolverla.
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