La famosa competición ciclista deja fotografías bien curiosas y simpáticas con todo tipo de público aplaudiendo a los deportistas.
A propósito hoy mismo leía en la introducción a un estudio teológico sobre la lucha por la santidad en la enseñanza de San Josemaría como muchos elementos del espíritu cristiano de lucha que, con el paso del tiempo, se habían materializado y conservado fundamentalmente en la vida monástica y después en la religiosa, son, en realidad, propios de cualquier fiel corriente, y San Josemaría no tiene dificultad para proponerlos a todos. Al mismo tiempo, prescinde de actitudes estrechamente ligadas a la vida religiosa, como la práctica de devociones o de mortificaciones que dificultarían el cumplimiento de los deberes profesionales, familiares y sociales. Con esto no predica un ascetismo mitigado, sino una lucha heroica en los quehaceres cotidianos. De ahí deriva todo un cuerpo de doctrina espiritual sobre la lucha cristiana en esas mismas actividades.
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