Somos protagonistas de nuestra vida.
En la vida de cada uno hay tres elementos con los que hay que contar:
- Las circunstancias que me han rodeado y me rodean, desde mi constitución corporal, mi herencia genética, los condicionamientos externos...
- Pero está mi voluntad libre, pues todas esas cosas las puedo orientar, sobre todo con las decisiones buenas que voy tomando. No debería decir "es que soy así" sino más bien "me he hecho así".
- Y lo más importante: Lo que estructura más mi personalidad son los dones de Dios, que inciden en lo más íntimo de mi ser. Entre estos se encuentra de modo eminente, el regalo inmenso de la filiación divina, recibido con el Bautismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario