miércoles, 30 de marzo de 2016
La mujer española
Hoy mamá cumple 29 años (al revés)
Y hace pocos días me sorprendió en una grabación que le hicieron mis primas Sonia y Rosa declamando de memoria y de un tirón la siguiente poesía:
Cierto día el Hada Azul,
quiso a la tierra bajar
y se mandó preparar
su gran carroza de tul.
Diciendo: 'A cada mujer
de las diversas naciones,
les voy a dar tantos dones
como pueda conceder'
Bajó aquí sin dilación,
tocó su cuerno amarante
y acudieron al instante
una de cada nación.
Y así fue haciendo lo mismo
pródiga con todas ellas,
repartiendo entre las bellas;
a una sentimentalismo,
a otra ingenio, a otra blancura,
a otra claro entendimiento,
a esa otra un alma pura...
Así acabó sus dones,
que entre todas repartió,
cuando al terminar salió
de entre todas las naciones
una gallarda manola
muy joven, casi chiquilla
que lucía una mantilla
de rica blonda española,
y que acercándose al Hada,
ruborosa dijo así:
Según veo para mí
no me habéis dejado nada.
Quedóse el hada un momento
suspensa de admiración
y fijando su atención en ella,
con acento dijo luego:
¿Tú que quieres
que yo te pueda otorgar?
¿Tienes algo que envidiar
a todas estas mujeres?
¿No tienes el pelo acaso
abundante, negro, hermoso?
¿No tienes el porte airoso?
¿No hay en tu mirada clara,
rayos de sol que fascina?
¿No es tu sonrisa divina?
¿No es bellísima tu cara?
Entonces, ¿qué quieres?, di
si aún juntando a todas ellas,
resultan menos bellas que tú.
¿Qué buscas aquí?
Sin embargo, dijo el Hada:
yo no quiero que al marcharte
tengas por qué lamentarte
de que no te he dado nada.
Y mirando a la manola
dijo alzando más el tono:
¡a ver, que traigan un trono
a la mujer española!
Y en este cuento me fundo
si es que este cuento no engaña,
para decir que en España
está lo mejor del mundo.
(Un poco exagerada, pero por ser su cumpleaños se lo permitimos. Desde el Congo, desde Nicaragua y muchos lugares más: ¡Felicidades, Conchita!)
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En Nicaragua, como en otros lugares, cuando uno tiene grandes deseos de contar cosas a los familiares, amigos colegas...y no hay tiempo, trata de resumir anteponiendo ese "para no hacerte largo el cuento". Pero ni así...
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