viernes, 28 de junio de 2019
Corazón de Jesús
"Dios Padre se ha dignado concedernos, en el Corazón de su Hijo tesoros inagotables de amor, de misericordia, de cariño...
La gracia renueva al hombre desde dentro, y le convierte -de pecador y rebelde- en siervo bueno y fiel. Y la fuente de todas las gracias es el amor que Dios nos tiene y que nos ha revelado, no exclusivamente con las palabras: también con los hechos. El amor divino hace que la segunda Persona de la Santísima Trinidad, el Verbo, el Hijo de Dios Padre, tome nuestra carne, es decir, nuestra condición humana, menos el pecado. Y el Verbo es la Palabra de la que procede el Amor.
El amor se nos revela en la Encarnación, en ese andar redentor de Jesucristo por nuestra tierra, hasta el sacrificio supremo de la Cruz...
En la fiesta de hoy, al considerar una vez más los misterios centrales de nuestra fe, nos maravillamos de cómo las realidades más hondas -ese amor de Dios Padre que entrega a su Hijo, y ese amor del Hijo que le lleva a caminar sereno hacia el Gólgota- se traducen en gestos muy cercanos a los hombres.
Dios no se dirige a nosotros con actitud de poder y de dominio, se acerca a nosotros, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres.
Jesús jamás se muestra lejano o altanero, aunque en sus años de predicación la veremos a veces disgustado, porque le duele la maldad humana. Pero, si nos fijamos un poco, advertiremos en seguida que su enfado y su ira nacen del amor: son una invitación más para sacarnos de la infidelidad y del pecado.
¿Quiero yo acaso la muerte del impío, dice el Señor, Yavé, y no más bien que se convierte de su mal camino y viva?. Esas palabras nos explican toda la vida de Cristo, y nos hacen comprender por qué se ha presentado ante nosotros con un Corazón de carne como el nuestro, que es prueba fehaciente de amor y testimonio constante del misterio inenarrable de la caridad divina."
(San Josemaría)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
En Nicaragua, como en otros lugares, cuando uno tiene grandes deseos de contar cosas a los familiares, amigos colegas...y no hay tiempo, trata de resumir anteponiendo ese "para no hacerte largo el cuento". Pero ni así...
No hay comentarios:
Publicar un comentario