martes, 24 de octubre de 2017
Una luz
A través de Chus, durante varios años directora de uno de los mejores colegios de enseñanza media, he tenido acceso a un artículo de Jaime, con gran sensibilidad igualmente para el mundo de la educación, en su caso la enseñanza superior.
Una luz: ¡Aprender a fracasar!
"Me dicen que en los colegios no se enseña a los niños a fracasar. Por eso ya no hay suspensos. Se eliminaron para evitar traumas infantiles que -se suponía- podían tener funestas consecuencias en la edad adulta. Me parece una lamentable carencia, pues en la vida humana el fracaso -grande o pequeño- es muchísimo más frecuente que el éxito.
Suele contarse que Thomas Alva Edison antes de descubrir en 1880 el filamento de bambú carbonizado que permanecía incandescente durante 1200 horas, lo había intentado con cerca de un millar de otros materiales. De sus intentos previos le contaba a un periodista: 'No fracasé, sólo descubrí 999 maneras de cómo no hacer una bombilla'. Esto es así en muchos ámbitos de la vida: para hacer algo bien, hay que hacerlo antes muchas veces mal.
Cuando Bertrand Russell comunicó al matemático Gottlob Frege una inconsistencia fundamental en su Conceptología, Frege en su respuesta mencionaba el dicho latino: 'Solatium miseris, socios habuisse dolorum' (El consuelo de los pobres es tener compañeros en su dolor). Es verdad. Cuántas veces la desgracia aúna, nos solidariza con los demás, mientras que el éxito, la lotería o las herencias separan gravemente a los seres humanos.
Y al mismo tiempo, cuántas veces aquello que parecía un fracaso resulta al final un éxito. Edison decía que muchos fracasos en la vida se deben a que se abandona por no ver lo cerca que se estaba del éxito. Yendo más a fondo, cada vez que algo me sale mal, me ayuda recordar aquello de san Agustín: 'Es malo sufrir, pero es bueno haber sufrido'"
(Un saludo a Juancho en 'La casa de las lámparas')
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En Nicaragua, como en otros lugares, cuando uno tiene grandes deseos de contar cosas a los familiares, amigos colegas...y no hay tiempo, trata de resumir anteponiendo ese "para no hacerte largo el cuento". Pero ni así...
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