Mi algo más que amigo, Joseph Kabamba, le gusta filosofar desde Kinshasa. La foto es de esa capital congoleña.
Recientemente se preguntaba si puede crecer la libertad. Y he aquí la respuesta:
- Los griegos saben que somos más libres en la medida en que dominamos los medios que nos conducirán a la felicidad.
Si soy capaz de levantarme puntualmente soy más libre, y feliz. La virtud nos hace más libres.
El fin es la felicidad.
Pero hay una noción ulterior a la felicidad: "el destinar"
Desde la intimidad de la persona entendemos que la felicidad griega, la posesión del fin, no basta.
Si no encontramos nuestra réplica, quedamos frustados.
Vistas así las cosas, nuestra libertad se dilata con la tarea de mi vida cuando sé agradarLe.
La ampliación de la libertad es el destinarse al Amor-
¡Caramba, Kabamba!