Cuenta una leyenda judía que Salomón, el más sabio de todos los hombres, fue visitado una vez por un rey de lejanas tierras, el cuál le pidió un favor.
Dadme -dijo aquel rey- una frase que recordar y que pueda ayudarme, tanto en períodos de infortunio como en épocas de prosperidad.
La frase que Salomón le dio fue la siguiente:
"Esto pasará también".
En el correr de su vida, cuando aquel rey se vio abrumado por las adversidades, solía repetirse a sí mismo:
"Esto pasará también", y así sostenía su paciencia y su valor.
Después, cuando se halló en prosperidad y todo el mundo hablaba bien de él, solía asimismo decir:
"Esto pasará también", acordándose de que no debía ensalzarse en demasía, ya que todas las alegrías terrenas se marchitan y duran poco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tus comentarios e ideas para este blog. Ánimo y escribe.