"Pronto, sacad el mejor traje y vestidle; ponedle un anillo en la mano y sandalias en los pies; traed el ternero cebado y matadlo, y vamos a celebrarlo con un banquete..." (Lc, 15. 22)
Me ha llamado mucho la atención el perrito del cuadro de Bartolomé Esteban Murillo. La vuelta a casa, la reconciliación, no es sólo con el Padre. Toda la creación participa de esa alegría. Hasta los irracionales.
Nunca lo había pensado de esa manera.
ResponderEliminarSaludos
Guau !
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